Revista Digital de Literatura y Crítica Literaria

        
REDACCIÓN

EDITA: ALMUZARA

En mayo de 1937, el poeta Miguel Hernández le escribía a su compañera Josefina Manresa, desde el frente de guerra en Jaén, contándole de forma consoladora que muchas veces merendaba en casa de Oselito y que ese era el único que le podía “sacar la risa a borbotones” en mitad de tanto desastre.

En realidad, ese Oselito era Andrés Martínez de León, el autor que acaba de recuperar Almuzara al publicar en un mismo volumen: Oselito en Rusia y Oselito extranjero en su tierra. Unas obras pioneras del cómic español y, especialmente, de la novela gráfica, que en esta edición la editorial enriquece con diversos apéndices y un prólogo del autor procedente de una notas manuscritas inéditas en las que cuenta la génesis del personaje.

En la primavera de 1936, el popular dibujante, escritor y humorista publica su viaje a la Rusia comunista, realizado con motivo del XVIII aniversario de la Revolución, y lo hace a modo de cómic y a través del célebre protagonista de sus historietas de humor, Oselito.  Además de las más de doscientas viñetas, en esta obra su autor nos ofrece una original narración figurada de su viaje por media Europa, en la que el protagonista cuenta a su modo toda esa experiencia, con enormes cargas de profundidad y de humor, hasta el punto de hacer hablar andaluz al mismísimo Stalin mientras lo convence de que los toros son imprescindibles para la revolución.

En un momento especialmente convulso en España, Oselito se nos presenta entre la imparcialidad política de un pintoresco séneca y rotundas afirmaciones que contrastan con “ese infierno... que tos pintan”, de modo que resiste la comparación y el contrapunto con toda la literatura del momento sobre Rusia, especialmente con El maestro Juan Martínez que estaba allí, de su amigo Manuel Chaves Nogales.

Dos años más tarde, en plena Guerra Civil, Oselito vuelve a ser protagonista de una aventura sin igual. Martínez de León realiza Oselito extranjero en su tierra —que publicamos en esta nueva entrega por primera vez desde su edición original en 1938—, en la que el protagonista decide infiltrarse en el frente enemigo para certificar que realmente está plagado de alemanes, italianos, moros y portugueses. Se trata de una sátira despiadada del bando nacional y sus líderes, Franco y Quiepo de Llano, sorprendente por su humor en medio de la batalla.

Según David González, editor de la obra, “hoy es inevitable considerarlo una auténtico maestro de la historia humorística, del cómic, de la ilustración periodística, y en el terreno de su evidente querencia, un ineludible referente de la realización gráfica de lo taurino.  Además, con los libros que presentamos en esta edición, queremos poner en valor su faceta como escritor, y no queda otra que considerarlo como un pionero de la novela gráfica en España”.

Andrés Martínez de León (Coria del Río, Sevilla, 1895 - Madrid, 1978), ilustrador, pintor, humorista y escritor español. Se estrena en El Noticiero Sevillano, donde publica por primera vez sus “monos”. Desde la década de los veinte será asiduo colaborador de la prensa sevillana y madrileña como viñetista de humor e ilustrador taurino.

Tras publicar su libro de Historietas sevillanas (1926) y, sobre todo, con la creación del popular personaje de Oselito, su fama se consolida en la década de los treinta. En 1931 publica Los amigos del toro o la parte sana de la afición, protagonizado por Oselito.

En 1935 ilustra, junto a Bartolozzi, las entregas de la biografía de Belmonte de Manuel Chaves Nogales y en la primavera de 1936 publica su formidable Oselito en Rusia. Al estallar la Guerra Civil se pone al servicio del ejército republicano y su célebre personaje, convertido en miliciano, reaparece en Oselito extranjero en su tierra (1938).

Tras finalizar la guerra, se le condena a 20 años de prisión por actividades de propaganda, pero gracias a muy influyentes amistades consigue el indulto y se traslada a vivir a Sevilla. En los años cincuenta vuelve a exponer su obra pictórica y se hace inconfundible como ilustrador taurino, y también costumbrista y deportivo, en la prensa nacional, además de mantener una colaboración en el semanario humorístico Don José. En 1954 publica una nueva edición de Los amigos del toro y cuatro años más tarde Oselito nos contará su Historia del Real Betis Balompié. En sus últimos años se volcó en su obra pictórica. Murió en Madrid en 1978.